Fernando Jáuregui, 40 años en la cresta del periodismo político.
El pasado 21 de noviembre de este 2018 que se nos va, recibimos en los almuerzos de nuestro Club a Fernando Jáuregui, un significado superviviente de los periodistas que contaron la Transición, instalado desde entonces en la cresta de la ola del periodismo político español. Este cántabro de 68 años, gallego consorte, huésped itinerante de las primeras redacciones de prensa, radio y televisión del país, autor de una veintena de libros, hacedor compulsivo de noticias, llegó a la mesa hecho noticia él mismo. Acababa de presentar en el Congreso la monumental obra “Los periodistas estábamos allí para contarlo. Un repaso al papel de la prensa en la Transición”, que él mismo coordinó. En el libro participan 105 periodistas-redactores, 50 fotógrafos y varios dibujantes y viñetistas. “Es un libro irrepetible”, reconoce Fernando, por la impensable probabilidad de volver a reunir a plumas tan lúcidas, plurales y discrepantes.
Nos habló de la España de esta hora “preocupante” afirmando que el Parlamento nunca ha estado más devaluado; de los políticos menguantes (en general, una nómina que no alcanza ni de lejos la altura intelectual y la generosidad de los protagonistas de la Transición, vino a decir) y de la prensa encendida que pretende guiarnos. Comprometió sus dotes prospectivas al prometernos elecciones anticipadas “sin remedio” el año que viene. Tiró de la oreja a Rajoy por su vuelo rasante con los separatistas catalanes que, en todo caso, llevan sobre sus espaldas la plena culpa de lo que nos pasa. ¨Rajoy tendría que explicar por qué nos ha dejado en estas manos¨ afirmó. Y recordó que Artur Mas, recién elegido presidente de la Generalitat de Cataluña en 2010 le dijo: ¨Ser independentista es ser retrógado¨.
Fernando Jáuregui salva a pocos ministros de la quema y pone igualmente a la oposición contra las cuerdas. Otro dato que nos dejó como analista político: “El reciente conflicto del Supremo ha dado a Ciudadanos un millón de votos”.
Sabueso de la mejor información, con muchas elecciones vividas y mucha España narrada en sus crónicas, por fin hemos podido exprimir a este periodista de vigente y afilada espada, de grata e inabarcable conversación.